Trabajar gratis, esa utopía a la que todos aspiramos y que nos llena, como al Borbón, de orgullo y satisfacción. Así lo deben imaginar esos empresarios a los que pagar poco les parece mal y pagar un precio digno les parece una insensatez propia de pringaos. Porque estás empezando y trabajar te curte y te hace un favor. Así sabes de qué va el mercado laboral, que la vida no es cocacola.
La diseñadora Jessica Hische también lo sabe, por eso desarrolló un cuadro en el que puedes discernir cuándo puedes trabajar gratis y cuándo se están aprovechando de tu buena fe. Está disponible en su versión original en la web shouldiworkforfree.com, creada a tal efecto. Como el traductor de Google aún necesita mejorar, me he permitido hacer mi propia versión, que es la que véis aquí arriba. Haz click sobre la imagen para ampliarla.
Además, hay en este mismo blog otra versión en vasco. Aquí mismo.
No está de más recordar que los concursos de diseño son una forma de trabajar gratis y de obtener mano de obra muy barata. Has de saber que existe un movimiento en torno a estas prácticas abusivas, No Spec, donde puedes saber más de lo que puedas creer al respecto.
Sobre todo, que no te tomen el pelo.
Además, hay en este mismo blog otra versión en vasco. Aquí mismo.
No está de más recordar que los concursos de diseño son una forma de trabajar gratis y de obtener mano de obra muy barata. Has de saber que existe un movimiento en torno a estas prácticas abusivas, No Spec, donde puedes saber más de lo que puedas creer al respecto.
Sobre todo, que no te tomen el pelo.