La muñeca Barbie ha sido motivo de inspiración para infinidad de diseñadores, sobre todo de moda. La que Jocelyne Grivaud nos muestra es de otro tipo. Más que con la moda, ha querido vincular el famoso juguete con una serie de imágenes icónicas y conocidas, en su proyecto Ma muse Barbie m'amuse (juego de palabras traducible por Mi musa Barbie me divierte).
Todo empezó en 1967, con una primera Barbie que le regalaron. Aquella muñeca ya desapareció de sus manos, pero quedó la fascinación que le produjo y que le empujó a llevar a cabo este proyecto.
Todo empezó en 1967, con una primera Barbie que le regalaron. Aquella muñeca ya desapareció de sus manos, pero quedó la fascinación que le produjo y que le empujó a llevar a cabo este proyecto.
"A menudo se ha criticado a Barbie por ser demasiado rubia, demasiado superficial, demasiado delgada, por ser un ideal del marketing, por esto y por aquello. Es ese perfil tan célebre el que he querido aplicar a otras imágenes emblemáticas".Aquí tenéis unos ejemplos de lo que este empeño ha producido.
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